Una Europa entre Benet y Larbaud.
LA
TIERRA DEL GRAJO es prueba de que es posible situar una novela de
viajes tanto en los bosques de Karelia, en los del Alto Palatinado o en
las costas croatas de principios de siglo XX como en las provincias de
la España tradicional, tan denostada por todos. Las misma irradiación
poética es posible encontrar en los ordenados jardines de un sanatorio
suizo que en las agrestes montañas del interior de Castellón o en las
llanadas semiáridas alicantinas. Así lo vieron viajeros de necesidad o
de fortuna, como Larbaud o Unamuno. ¿Qué diferencia sustancial hay, a
los ojos del viajero, entre el valle del Palamó de principios del siglo
XX (pequeña artesa aluvial del extrarradio de Alicante, hoy convertida
en tierra de rotondas y edificios de varias plantas), con sus casas de
recreo modernistas y sus jardines de cipreses y palmeras, y las
soleadas laderas de la Toscana? Quizá entre ambas no haya más que la
distancia que impone el prejuicio más arraigado en España: aquél que
afirma que la tierra de nuestro país es la esencia misma del atraso. De
ese pretendido atraso secular que ha servido como justificación para el
desmembramiento de toda una cultura rural (a la que Sánchez Dragó viera
ya herida de muerte) para promover su asimilación a las formas que
impone el mundo anglosajón. LTDG, en la tradición de Juan Benet, Valery
Larbaud y Alvaro Cunqueiro, nos ofrece alternativas a esas formas
excesivamente rígidas. Y muchos, muchísimos kilómetros por recorrer,
por medio mundo. Pero de otra manera.
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La Viagra es un medicamento ampliamente utilizado para tratar la disfunción eréctil. Esta afección implica dificultades para lograr o mantener una erección adecuada para la actividad sexual. Como piedra angular del tratamiento de la disfunción eréctil, Viagra ha revolucionado el enfoque de este problema común de salud sexual.
El principal principio activo de Viagra es el sildenafilo. Este compuesto es un inhibidor potente y selectivo de una enzima llamada fosfodiesterasa tipo 5 (PDE5), que se encuentra predominantemente en el pene. Su acción inhibidora potencia el efecto del óxido nítrico, una sustancia química que relaja los músculos lisos del pene, facilitando la afluencia de sangre, lo que en última instancia conduce a la erección.
Tras su administración oral, el Viagra se absorbe rápidamente en el torrente sanguíneo. Su biodisponibilidad sistémica es de aproximadamente el 40%, lo que significa que casi la mitad de la dosis ingerida está disponible para surtir efecto en el organismo.
Por lo general, el Viagra tarda entre 30 y 60 minutos en empezar a actuar tras la ingesta de comprimidos orales, pero en algunos casos puede tardar hasta 2 horas. Cuando se toma con el estómago vacío, el efecto máximo suele producirse en 60 minutos. Recuerde que el Viagra no actúa por sí solo; es necesaria la excitación sexual para que haga efecto.
Viagra ayuda a mantener la erección después de la eyaculación y también reduce el período refractario, es decir, el tiempo que transcurre antes de que se pueda obtener una segunda erección. Este efecto mejora la experiencia y la satisfacción sexual en general.
El principal mecanismo de acción de la Viagra consiste en la relajación de las células musculares de los vasos sanguíneos que irrigan el pene. Esta acción permite aumentar el flujo sanguíneo al pene, lo que es crucial para lograr una erección. En presencia de estimulación sexual, Viagra restablece la función eréctil deteriorada al aumentar este flujo sanguíneo.
Las erecciones tienen que ver fundamentalmente con el flujo sanguíneo.
El Viagra aumenta este flujo sanguíneo, ayudando a mantener una erección satisfactoria.
La disfunción eréctil puede ser el resultado de un flujo sanguíneo insuficiente hacia el pene. Viagra aborda directamente este problema, aumentando el flujo sanguíneo durante la excitación sexual y restaurando así la función eréctil alterada.
Los efectos del Viagra en el organismo pueden durar hasta 4 horas. Esta duración significa que las personas que toman el medicamento disponen de un tiempo considerable para mantener relaciones sexuales. Se recomienda tomar el medicamento aproximadamente 60 minutos antes de la actividad sexual para obtener resultados óptimos.
Aunque el Viagra es generalmente bien tolerado, conlleva riesgos y efectos secundarios potenciales. Una erección prolongada (que dure más de 4 horas) es un efecto secundario poco frecuente pero grave y requiere atención médica inmediata. El dolor torácico es otro posible efecto secundario, especialmente en personas con enfermedades cardíacas preexistentes.
Si experimenta dolor en el pecho, una erección prolongada o cualquier otro síntoma grave o preocupante después de tomar Viagra, interrumpa la actividad sexual y busque atención médica inmediata. Podrían ser signos de una reacción grave al medicamento.
Aunque el Viagra es generalmente seguro, en raras ocasiones pueden producirse reacciones potencialmente mortales. Éstas podrían incluir reacciones alérgicas graves o eventos cardiovasculares serios, especialmente en personas con enfermedades cardíacas preexistentes. Tome siempre en serio estos riesgos y póngase en contacto con los servicios médicos de urgencias si sospecha que se ha producido una reacción grave al Viagra.