Una Europa entre Benet y Larbaud.
LA
TIERRA DEL GRAJO es prueba de que es posible situar una novela de
viajes tanto en los bosques de Karelia, en los del Alto Palatinado o en
las costas croatas de principios de siglo XX como en las provincias de
la España tradicional, tan denostada por todos. Las misma irradiación
poética es posible encontrar en los ordenados jardines de un sanatorio
suizo que en las agrestes montañas del interior de Castellón o en las
llanadas semiáridas alicantinas. Así lo vieron viajeros de necesidad o
de fortuna, como Larbaud o Unamuno. ¿Qué diferencia sustancial hay, a
los ojos del viajero, entre el valle del Palamó de principios del siglo
XX (pequeña artesa aluvial del extrarradio de Alicante, hoy convertida
en tierra de rotondas y edificios de varias plantas), con sus casas de
recreo modernistas y sus jardines de cipreses y palmeras, y las
soleadas laderas de la Toscana? Quizá entre ambas no haya más que la
distancia que impone el prejuicio más arraigado en España: aquél que
afirma que la tierra de nuestro país es la esencia misma del atraso. De
ese pretendido atraso secular que ha servido como justificación para el
desmembramiento de toda una cultura rural (a la que Sánchez Dragó viera
ya herida de muerte) para promover su asimilación a las formas que
impone el mundo anglosajón. LTDG, en la tradición de Juan Benet, Valery
Larbaud y Alvaro Cunqueiro, nos ofrece alternativas a esas formas
excesivamente rígidas. Y muchos, muchísimos kilómetros por recorrer,
por medio mundo. Pero de otra manera.
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¿Cuál es la causa más frecuente de disfunción eréctil?
La disfunción eréctil, a menudo abreviada como DE, se caracteriza por la dificultad para lograr o mantener una erección lo suficientemente firme como para mantener relaciones sexuales. A menudo denominada simplemente DE, supone un obstáculo para lograr y mantener una erección que cumpla los criterios para mantener relaciones sexuales.
La disfunción eréctil no es una rareza. De hecho, se ha informado de que hasta 30 millones de hombres se enfrentan a problemas de DE, lo que indica su gran prevalencia en diversos grupos de edad.
Las causas fundamentales de la disfunción eréctil pueden clasificarse en factores físicos y psicológicos. En la mayoría de los casos, la disfunción eréctil se debe a complicaciones físicas, en particular problemas relacionados con el riego sanguíneo del pene. Existen numerosos problemas físicos que pueden provocar disfunción eréctil, como por ejemplo
En el frente psicológico, diversos problemas de salud mental como la depresión, la ansiedad, el estrés, los conflictos en las relaciones y otras preocupaciones relacionadas pueden actuar como una barrera, inhibiendo los sentimientos sexuales y conduciendo a la disfunción eréctil.
Se ha relacionado un número considerable de medicamentos con la disfunción eréctil, y es fundamental destacar su importancia. Un estudio dirigido por E Kaplan-Marans en 2022 arroja luz sobre esta asociación. La investigación indica que de los 20 medicamentos analizados, la asombrosa cifra de 6.142 informes estaban relacionados con la disfunción eréctil. Profundizando más, los inhibidores de la 5-α reductasa (5-ARI) y los medicamentos neuropsiquiátricos fueron responsables de 2.823 informes, lo que representa el 46% de todo el conjunto de datos. Además, los medicamentos cardiológicos constituyeron el 9% de todas las notificaciones de DE, siendo el amlodipino, la simvastatina y la atorvastatina los medicamentos más frecuentemente asociados con la DE. Dentro del espectro de medicamentos, la finasterida y la dutasterida mostraron una notificación significativamente desproporcionada, lo que subraya su potente asociación con la DE.
Para navegar por el laberinto de la disfunción eréctil es necesario conocer sus modalidades de tratamiento. Existen numerosas vías a tener en cuenta:
Cambios en el estilo de vida: abordar los desencadenantes físicos de la disfunción eréctil requiere un enfoque proactivo del estilo de vida. Esto incluye dejar de fumar, adoptar una dieta equilibrada para combatir la obesidad y practicar una actividad física regular.
Medicamentos: En el ámbito de las intervenciones farmacéuticas, el sildenafilo (Viagra) y el tadalafilo (Cialis) se han consolidado como los guerreros de primera línea contra la disfunción eréctil. Mientras que el Sildenafilo es preferido por quienes buscan un remedio ocasional, el Tadalafilo se ha ganado el favor de quienes buscan una solución más regular.
Factores de riesgo de la disfunción eréctil Cabe señalar que determinados grupos de hombres corren un mayor riesgo de padecer disfunción eréctil. Los que llevan un estilo de vida sedentario, han sido diagnosticados de síndrome metabólico, fuman o padecen enfermedades como hipertensión, enfermedades cardiovasculares, niveles elevados de colesterol o niveles bajos de testosterona son más propensos a la disfunción eréctil.
Nota: El artículo se ha redactado de acuerdo con los datos facilitados y puede que se le añadan o modifiquen datos en función de nuevos estudios u opiniones de expertos.